¿Has oído hablar del microbioma de tu cuerpo?

Todos tenemos un microbioma, ubicado en nuestras entrañas. Se compone de billones de bacterias, virus, hongos y otros seres vivos microscópicos. ¡Así es, las bacterias, los virus y los hongos viven dentro de nosotros! Por inquietante que suene, si esos elementos no existieran en nuestros cuerpos, no existiríamos . De hecho, la mayoría de las enfermedades crónicas y los estados nocivos del ser pueden atribuirse a un desequilibrio en nuestro microbioma. La alteración de la composición microbiana intestinal se asocia con trastornos metabólicos, enfermedades cardiovasculares y varios trastornos mentales .

¿Sabías?...

• Más de 100 billones de bacterias forman tu microbioma
• Somos esencialmente una parte humana por una parte de microbio en términos de número de células (casi 1: 1 )
• En total, estos microbios pesan entre 2 y 5 libras, aproximadamente el peso del cerebro humano. Este es un hecho interesante, porque el intestino y su microbioma se consideran el segundo cerebro del cuerpo.
• Sin estos microbios, sería casi imposible sobrevivir
• Una estimación aproximada de 1000 especies bacterianas en el intestino con 2000 genes por especie arroja una estimación de 2 000 000 de genes, 100 veces la cifra de aproximadamente 20 000 genes humanos

¿Por qué debería importarte?

Con demasiada frecuencia, hay una llamada incorrecta para vendar el síntoma de un problema de salud en forma de medicamento farmacéutico u otro tratamiento. Sin embargo, puede hacer más daño que bien, por lo que es importante comprender cómo cuidar su microbioma.

¿Qué hace el microbioma?

- Controla el sistema inmunológico, y responde a la infección

- Controla la salud del cerebro, afectando el sistema nervioso central, que controla la función cerebral. Produce neurotransmisores como la serotonina.

- El microbioma puede desempeñar un papel en el mantenimiento del peso

- Ciertas bacterias saludables en el microbioma pueden mejorar la salud intestinal

- Puede beneficiar la salud del corazón

- Puede controlar el azúcar en la sangre y reducir el riesgo de diabetes

El microbioma también...

- Descompone algunos de nuestros alimentos, incluidos ciertos carbohidratos, y libera su energía para que la usemos.

- Produce grandes cantidades de nuestros neurotransmisores, sustancias químicas que actúan como mensajeros entre nuestro cerebro y nuestro cuerpo, que desempeñan un papel esencial en el funcionamiento de nuestro cuerpo.

- Produce ciertas vitaminas y aminoácidos.

- Ayuda a absorber ciertos minerales

- Es un contribuyente altamente activo a nuestro sistema inmunológico que nos ayuda a combatir las enfermedades.

- Evita que las bacterias "malas" peligrosas se apoderen de nosotros y nos enfermen

- Nos ayuda a descomponer algunas drogas y toxinas

En la segunda parte de este artículo de dos partes, discutiremos:

¿Qué puede pasar con un intestino desequilibrado?

¿Por qué el intestino se desequilibra?

¿Qué puede mejorar el microbioma intestinal?

¡Es increíble observar la biología y ver cómo apunta a Cristo! En el plan de Dios para la creación, Él diseñó diferentes especies de microbios para trabajar juntos en el suelo para ayudar a traer nutrientes a las plantas para producir alimentos, medicinas, etc. para nosotros. Los diversos microbios tienen una relación simbiótica. Nosotros también fuimos creados por Dios para las relaciones, para prosperar y hacer Su obra aquí en la tierra. Jesús nos dice: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Él no dice ama solo a tus vecinos que se ven y actúan como tú.

Como creyentes, somos un cuerpo de muchos tipos de personalidades, dones, talentos y habilidades. Estamos llamados a usarlos para glorificar a Cristo, para ser sus manos y sus pies. Sin unirnos en el cuerpo, la obra de Cristo no se realiza: ir hasta los confines de la tierra y difundir el evangelio, cuidar de los huérfanos y las viudas, sanar y animarnos unos a otros en el nombre de Cristo.

Así como los microbios del suelo obtienen alimento de las plantas y otros elementos para prosperar, y los microbios del cuerpo obtienen su combustible de la fibra y otras fuentes de alimento que proporcionamos, nosotros, como elementos individuales del cuerpo de Jesús, obtenemos nuestro combustible del Espíritu Santo en prosperar y hacer Su obra. No podemos hacerlo aislados unos de otros, y no podemos hacerlo solo con aquellos que elegimos o que son como nosotros. Tampoco podemos hacerlo sin el poder del Espíritu Santo. Estamos llamados a ser parte del cuerpo de Cristo con una diversidad de creyentes. A Dios le gusta la diversidad en las relaciones y se refleja en la naturaleza, la biología y debería reflejarse en nosotros.

Todos ustedes juntos son el cuerpo de Cristo, y cada uno de ustedes es parte de él.

1 Corintios 12:27 (NVI)

Así como un cuerpo, aunque es uno, tiene muchas partes, pero todas sus muchas partes forman un solo cuerpo, así es con Cristo.

1 Corintios 12:12 (NVI)

Solos, no podemos hacer la vida como Dios la planeó.